Shavuot 5785
- Comunicación CJM
- hace 5 días
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FECHAS DE SHAVUOT 6 y 7 Siván de 5783 (2 y 3 de junio 2025)
La noche de la Torá
Desde tiempos antiguos, los cabalistas instituyeron la sagrada costumbre de dedicar la noche entera de Shavuot al estudio de la Torá.
Esta tradición, se extendió con fuerza por todas las comunidades judías del mundo.
Durante esta noche —en la que el sueño cede su lugar al aprendizaje y conexión con la palabra divina— estudiamos el Tikún Leil Shavuot, una recopilación de textos y fragmentos del Zóhar.
Shavuot es, ante todo, la fiesta de la Torá. Celebramos con libros abiertos, ojos atentos y corazones despiertos. Es una vigilia sagrada, una noche en la que renovamos nuestro pacto con D-s a través del estudio y la introspección. Resuenan entonces las palabras del Cantar de los Cantares: “Yo duermo, pero mi corazón está despierto”.
En esta noche de entrega total, el cuerpo y el alma parecen transportarse al pie del monte Sinaí, reviviendo el estremecimiento del trueno, el destello del relámpago y la Voz que atraviesa los tiempos: “Yo soy el Eterno, tu D-s…”
Los 10 mandamientos
En Shavuot recordamos la entrega de la Torá en el monte Sinaí. En el corazón de ese momento eterno, D-s proclamó:
Yo soy el eterno, tu D-s
No tendrás otros dioses (ídolos)
No pronunciarás el nombre de D-s en vano
Recuerda el día de Shabat para santificarlo
Respeta a tu padre y a tu madre
No matarás
No cometerás adulterio
No robarás
No hablarás falso testimonio
No codiciarás nada de tu prójimo
Los nombres de la fiesta
Esta festividad tiene un profundo significado espiritual y agrícola, y se celebra al concluir las siete semanas del cómputo del Ómer.
El nombre Shavuot proviene de la Torá: "Siete semanas has de contar a partir del comienzo de la cosecha de trigo, y guardarás la fiesta ante el Eterno tu D-s". (Devarim 16:9-10)
Shavuot no solo marca la conclusión de este conteo, sino que es una fiesta de gratitud, celebración y conexión con nuestra historia.
Fiesta de las primicias: Se traían los primeros frutos (trigo, cebada, uvas, higos, granadas, aceitunas, dátiles) como ofrenda a D-s, simbolizando el agradecimiento por la abundancia de la Tierra de Israel: "Tomarás las primicias... las pondrás en un cesto y con él irás al lugar que el Eterno escoja... y dirás: ‘He aquí que te traigo los primeros frutos de la tierra que Tú, D-s, me has dado.’" (Devarim 26:2-10).
Fiesta de la cosecha: La fiesta se celebra en la época de la recolecta del trigo. Se hacía una ofrenda especial en la época del Templo: los dos panes hechos de harina que estaba molida del trigo nuevo, Sheté Haléjem.
Conclusión de la libertad: Conmemora la conclusión del proceso de libertad que comenzó en Pesaj con la salida de Egipto, libertad física, hasta la recepción de la Torá en Shavuot, libertad espiritual.
Entrega de la Torá: Shavuot es el día en que recibimos la Torá en el Monte Sinaí y marcó el inicio de nuestra relación eterna con D-s y nuestra misión como pueblo. La Torá se entregó el 6 de Siván, más el recibimiento de la Torá continúa durante todos los días del año.
Origen de Shavuot
Shavuot no solo marca el final del conteo del Ómer: es el momento en que el pueblo de Israel recibió la entrega de la Torá en el Monte Sinaí.
“Y Hashem dijo a Moshé: He aquí que me revelo a ti en una nube espesa, para que el pueblo escuche cuando Yo hable contigo…” (Shemot 19:9)
Frente al Har Sinaí, todo Am Israel estaba presente. La Revelación fue pública, directa, masiva a más de 2.5 millones de personas. No hay otro episodio en la historia humana con un testimonio colectivo de esa magnitud.
Como enseña Rabí Yehudá Haleví en El Cuzarí, este hecho es único: nunca fue negado ni siquiera por otras religiones. Rabí Yosef Albo (Sefer HaIkarim) explica que D-s quiso que la Torá fuera entregada públicamente para que no quedara duda alguna sobre su origen divino.
La Torá misma afirma: “¿Ocurrió jamás algo semejante? ¿Oyó algún pueblo la voz de Hashem desde el fuego como tú la has oído?... A ti se te ha mostrado para
que sepas que Hashem es Elokim, y no hay otro fuera de Él.” (Devarim 4:32-35).
Revelación y compromiso
Con la entrega de la Torá, culmina el proceso iniciado en Yetziat Mitzraim: salimos físicamente de Egipto en Pesaj, y en Shavuot recibimos nuestra identidad espiritual como pueblo. Desde entonces, no solo somos libres, sino responsables.
Maimónides escribe en Hiljot Yesodé HaTorá que el pueblo no creyó en Moshé por los milagros, sino porque ellos mismos vieron y oyeron. Fue una emuná basada en vivencia, no en fe ciega.
A partir de entonces, conceptos como "honra a tu padre y a tu madre" dejaron de ser sugerencias éticas y pasaron a ser mandamientos divinos. Como dice Yejezkel Kaufman, desde el Sinaí la moral forma parte del deber ordenado por D-s.
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